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El conjunto madridista agranda su leyenda ante los reds tras remontar dos goles en el mejor homenaje posible a Amancio



El Real Madrid acaricia los cuartos de final de la Liga de Campeones después de protagonizar ante el Liverpool otra actuación para la historia en 'su' Champions, la competición en la que defiende título, con la que mantiene un idilio particular y en la que siempre saca su mejor versión. El partido de anoche tuvo de todo. Porque los de Ancelotti encajaron dos goles en un abrir y cerrar de ojos, igualaron antes del descanso y protagonizaron una espectacular exhibición en el segundo período para terminar goleando a la que ya es su 'víctima favorita' (2-5).

Tras el pertinente homenaje a Amancio, uno de los líderes del Madrid de los ye-yés, el Madrid comenzaba el partido en un feudo propicio. El rival dejaba buen recuerdo en la memoria reciente. Las finales contra el Liverpool de 2018 en Kiev y la del pasado año en París motivaban que pensar en los reds se asociara a imágenes gratas en las mentes de los madridistas. Pero esas sensaciones se emborronaron pronto. Porque el Liverpool comenzó con una marcha más y tardó tres minutos en abrir el marcador. Un pase interior de Salah fue aprovechado por Darwin Núñez para batir de tacón a Courtois.

El Madrid, que había recuperado cierto crédito en sus últimas actuaciones no transmitía buenas vibraciones. Y los peores augurios se cumplieron a los 13 minutos cuando el Liverpool amplió su renta. Se juntaron una mala cesión de Carvajal y una cantada de Courtois, la primera desde que aterrizó en Concha Espina. El meta belga se entretuvo, el balón rebotó en una de sus rodillas y no supo despejar, lo que aprovechó Salah para ampliar la ventaja local. Courtois hacía recordar a Karius y su error garrafal de hace cuatro años, cuando falló en un despeje que tocó en Benzema y supuso el primer gol de aquella final. E incluso los más futboleros rememoraron la debacle del Madrid en la tierra de los Beatles allá por 2009 después de que el entonces presidente Vicente Boluda hubiera vaticinado antes de la eliminatoria que el cuadro madridista iba a "chorrear al Liverpool". El equipo de Rafa Benítez, con Gerrard y Fernando Torres como caras más conocidas, ganó por la mínima en el Bernabéu (0-1) y goleó a los blancos en Anfield (4-0). Ese resultado pasó a la historia como el partido 'del chorreo' y gestó numerosos cánticos de mofa contra los madridistas en los años siguientes ("eo, eo, eo, esto es un chorreo") cuando eran superados con suficiencia.

Así, en 13 minutos, se había pasado del buen recuerdo de la final de París a la retrospectiva dolorosa del chorreo. El Madrid perdía por dos a cero y los augurios eran pésimos.
Un Vinicius sideral

Pero pronto apareció Vinicius. Desde la posición de extremo izquierdo y entre varios defensas, con una acción personal y un disparo al palo largo, el brasileño demostró que es uno de los delanteros en mejor forma del continente. Hablando sólo de lo deportivo, a su explosividad y su regate se le suma ahora lo bien que define. El Madrid acortaba distancia a los veinte minutos. Y al mismo tiempo, se levantaba y comenzaba a mirar a los ojos a su rival.

Los dos equipos disfrutaron en los minutos siguientes de una clara opción. Los locales, con una maraña de jugadores en boca de gol en una acción que ni Salah ni Darwin Núñez lograron rematar y en la que Militao se erigió en salvador entre palos. Los visitantes, con un lanzamiento de Vinicius similar al de su primer gol y que Alisson despejó en una gran estirada. Entre una y otra oportunidad llegó la lesión de Alaba, que dejó su puesto a Nacho.

El Madrid había mejorado como quedó confirmado con otra ocasión, esta vez en las botas de un Valverde que chutó demasiado alto cuando trató de aprovechar con un potente lanzamiento un balón suelto en área rival. Y Vinicius, omnipresente, aparecía en casi todas sus opciones de peligro. Y si un gol del Liverpool había llegado con una cantada de Courtois, el empate llegó con una de Alisson. Si Courtois hizo recordar minutos antes a Karius, la acción de Alisson se pareció todavía más a la de aquella noche del actual portero del Newcastle. Porque un despeje de Alisson rebotó en un Vinicius al que la Diosa fortuna parece haber señalado y llegó el empate. Hablando de recuerdos del pasado, el Madrid se erigía en el de 2022, en el de las ciencias ocultas y en el que reaccionaba o remontaba cuando parecía muerto.

Pudo incluso llegarse al descanso con ventaja madridista, pero Henderson tocó lo justó la pelota cuando Rodrygo se disponía a aprovechar un pase de la muerte de -quién si no- Vinicius. El intermedio interrumpía un encuentro disparatado y dejaba todo abierto para el segundo parcial. Habían sido 45 minutos para el recuerdo. Recuerdos como el del fallecido y homenajeado Amancio en los prolegómenos. Recuerdos como las finales ganadas al Liverpool y el chorreo al Madrid de Boluda. Con los porteros emulando a Karius, los madridistas reaccionaban y volvían a ser 'el Madrid de las remontadas'.
Militao y Benzema concretan la remontada

Pero las remontadas no son tales si el equipo en desventaja no se pone por delante en el marcador, y pronto el término se dio por bien empleado. Porque recién iniciada la segunda parte, una falta lateral desde la izquierda y sacada al primer palo por Modric fue cabeceada a la red por un Militao que remató libre de marca en el primer palo ante una zaga del Liverpool que defendía en zona y se limitó a mirar.

Carvajal jugó con fuego con un pequeño empujón a Darwin Nuñez en un salto que rayó la infracción en área madridista pero poco tardó Benzema en ampliar la ventaja visitante, en una jugada con especial protagonismo de Rodrygo, autor de la internada por la derecha y de la pared que terminó con el tiro del francés, que desvió Joe Gómez despistando a Alisson.

Klopp movió ficha con dos variaciones en su ataque pero el destino parecía ya escrito en favor de otra noche gloriosa en la Champions del actual campeón. Porque había crecido mucho en los últimos minutos y además de Vinicius, Valverde, Camavinga, Benzema o Modric también querían postularse a ser protagonistas de otra noche histórica. Y fue el croata, veinticuatro horas después de asegurar que quiere ganarse la renovación por lo que da en el presente y no por lo que ha dado en el pasado, quien robó el balón, se zafó de su marca e inició la jugada del quinto gol. Vinicius recibió y asistió a Benzema y el francés recortó a Alisson y marcó con tres defensas de los reds entre palos.

La noche se convertía en grandiosa para el Real Madrid. En otro recuerdo épico. De nuevo, frente a un Liverpool  que ya no querrá verlo ni en pintura. Y en el mejor homenaje para Amancio. Hasta el final, control absoluto de un Real Madrid ante un conjunto que perseguía sombras y que acogió de buen grado la conclusión del choque. Hubo chorreo, pero a favor de los Ancelotti en un inesperado guión repleto de giros. El Madrid roza los cuartos tras otra noche mágica de los blancos. Una nueva pesadilla de los reds.

LIVERPOOL, 2 - 5 REAL MADRID (2-2, al descanso)

LIVERPOOL: Alisson; Alexander-Arnold, Van Dijk, Joe Gomez (Matip, min.73), Robertson; Henderson (Milner, min.73), Fabinho, Bajcetic (Elliot, min.85); Salah, Gakpo (Firmino, min.64) y Núñez (Jota, min.64).

REAL MADRID: Courtois; Carvajal, Militao, Rüdiger, Alaba (Nacho, min.27); Camavinga, Modric (Kroos, min.87), Valverde; Rodrygo (Ceballos, min.81), Benzema (Asensio, min.87) y Vinicius.

GOLES: 1-0, minuto 4. Darwin Núñez. 2-0, minuto 14. Salah. 2-1, minuto 21. Vinicius. 2-2, minuto 36. Vinicius. 2-3, minuto 47. Militao. 2-4, minuto 55. Benzema. 2-5, minuto 67. Benzema.

ÁRBITRO: Istvan Kovacs (RUM). Amonestó a Elliot (min.93) por parte del Liverpool, y a Vinicius (min.60), en el Real Madrid.

ESTADIO: Anfield.

espectacular nueva actuacion de mi querido vini. con dos goles, asistencia de gol y
forzando corners que terminan en gol y sin cesar de crear peligro constantemente.
extraordinario fuera de serie. echandose el equipo a su espalda cuando este mas lo
necesitaba. todo el juego pasa por vini, el madrid jugando casi siempre por la
izquierda.

y gracias a dios, o mas bien al civismo y a la educacion, fuera de españa le respetan
y admiran y no le dan los palos y agreden e insultan como en españa hacen tanto y
asi el no cae inocentemente en provocaciones saliendose del partido, que es lo que
se busca por el gran temor que se le tiene por su enorme calidad y el gran peligro
que crea en cada partido.

gran partido tambien de nacho neutralizando al peligroso y talentoso salah.

el liverpool empezo muy bien presionando al maximo al madrid y esta presion tuvo
sus frutos, con el claro absurdo error de courtois. pero despues tras el espectacular
golazo de vini el madrid volvio a sacar su raza o adn o como se le quiera llamar e
hizo una exhibicion en anfiled, lo nunca visto en este torneo endosandole 5 goles
al equipo que ha ganado 6 champions.

resumiendolo: lo del madrid en la champions ya no tiene nombre, nos quedamos
sin adjetivos.