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Pechugas de pollo a la Villaroy

Iniciado por Alfonsozgz, Abr 03, 2017, 22:20:39

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Alfonsozgz


Pechugas de pollo a la Villaroy
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Pechugas de pollo a la Villaroy   
Info.

    Media
    85 minutos
    Para 4 personas
    1.55 €/persona
    245kcal por 100g.
    Recetas de carnes y aves

Ingredientes para Pechugas de pollo a la Villaroy

    8 filetes de pechuga de pollo
    Para la bechamel:
    50 g. de mantequilla
    75 g. de harina de trigo
    400 ml. de leche
    Sal y pimienta negra recién molida (al gusto)
    Para el rebozado:
    100 g. de harina de trigo
    200 g. de pan rallado
    2 huevos grandes
    Aceite de oliva virgen extra (el necesario para freír los filetes de pollo)
    Guarnición: una bolsa de ensalada mixta de canónigos y rúcula, 5 nueces, aceite de oliva virgen extra, vinagre de jerez y sal.

Cómo hacer pollo a la Villaroy. Este "Pollo a la villaroy" es una manera diferente de preparar esta carne blanca, que nos puede sacar de la monotonía y darle un poco de "alegría" frente las preparaciones más clásicas de las recetas con pollo que encontraréis en el blog.

El nombre del plato deriva de la Salsa Villeroy (o villaroi) usada para recubrir la carne de pollo, muy similar a la archiconocida bechamel. Se diferencia de ésta en que se le añade queso rallado y clara de huevo, dándole una textura más espesa.

El nombre de la salsa se debe al Marqués de Villeroy (Francia, 1644-1730), un militar francés que sufrió severas derrotas en el campo de batalla, pero siempre bien protegido por el "Rey Sol" Luis XIV que le tenía gran estima. Esta salsa siguió vigente durante los siglos XVIII y XIX, aunque ya en el siglo XX con la "nouvelle cuisine" fue evolucionando hasta ser considerada como una bechamel enriquecida. Esta receta de pollo a la Villaroy utiliza la clásica salsa bechamel entre sus ingredientes aunque podéis añadirle el queso rallado para darle un punto más de cremosidad y acercaros así a la receta original.

Para el plato se utiliza la parte más magra del pollo o de otra ave, es decir, la pechuga, que naparemos con la bechamel para terminar rebozándola. Es una receta sencilla, muy jugosa y que triunfa especialmente entre los más pequeños de la casa, que suelen "adorar" todo lo que lleve bechamel, como las croquetas.

Se puede añadir el queso rallado para darle un punto más de cremosidad a la salsa. Espero que os animéis con estos filetes de pechuga de pollo con un toque distinto en casa. He optado por acompañarlos con una ensalada con canónigos, rúcula, nueces y una vinagreta clásica, con vinagre de jerez. Un plato completo y de rechupete.
Preparación de las pechugas de pollo a la Villaroy

La base de la receta son las pechugas de pollo. Por lo que es importante comprar unas de buena calidad y que luego nos garanticen jugosidad y buen sabor. Pediremos al carnicero/a que nos las divida en 3-4 filetes cada una, sin que sean demasiado delgados.

    Lo primero que vamos a hacer es pasar las pechugas por la plancha o sartén. Es necesario cocinarlas "en el punto" porque luego con el rebozado no se harían lo suficiente.
    Si queremos un mejor resultado visual del plato final, recortamos un poco los filetes con un cuchillo, para darles uniformidad y que se parezcan todos en tamaño.
    Salpimentamos los filetes al gusto y en una sartén (o plancha) con un poco de aceite de oliva, los pasamos vuelta y vuelta un par de minutos.
    Queremos que se cocinen "al punto", hechos por fuera y jugosos por dentro. Retiramos y reservamos para más tarde.
    Una vez hechas las pechugas, pasamos a preparar una salsa bechamel, que ya he hecho muchas veces en el blog.
    Es importante que no nos queden grumos, así que si optáis por lo fácil, es aconsejable elaborarla con leche templada.

Preparación de la salsa bechamel para rellenar el pollo

    Calentamos la leche en un cazo, pero sin que llegue a hervir ni calentarse demasiado. Solo queremos darle temperatura para favorecer que no se hagan grumos.
    Para este fin también vamos a tamizar la harina con un colador. En otro cazo grande incorporamos la mantequilla y a fuego bajo, dejamos que se vaya derritiendo hasta que esté líquida por completo.
    Añadimos ahora, poco a poco, la harina tamizada, al mismo tiempo que vamos mezclando.
    Obtendremos una masa de color dorado que denominamos "roux". Este paso es importante ya que la harina debe quedar bien cocinada.
    Echamos la mitad de la leche templada y removemos sin parar con unas varillas, en la misma dirección, para que se vaya espesando y formando la salsa.
    Echamos un poco de sal. Al mezclar, comprobamos que no se formen grumos y si es así los vamos aplastando. Echamos la leche restante y seguimos con el proceso de igual manera.
    Nos debe quedar una salsa bechamel homogénea, sin grumos y ligeramente espesa. Dejamos que repose unos 5 minutos antes de pasar al siguiente paso.

Rebozado. Fritura y presentación final del pollo a la Villaroy

    En una fuente o plato ponemos un papel de horno. Cogemos los filetes de pechuga, los napamos (recubrimos por ambos lados) con la salsa bechamel y los colocamos sobre el papel.
    Reservamos durante 1 hora en la nevera para que enfríe y coja cuerpo la salsa.
    Para el rebozado vamos a necesitar los ingredientes típicos: la harina, el pan de rallado y los 2 huevos batidos.
    Si es por gustos, podéis hacerlo solo con huevo y pan rallado, aunque yo prefiero hacerlo también con harina.
    Podemos freírlos en freidora o en una sartén ancha con abundante aceite. Lo importante es que el aceite esté bien caliente y que los filetes se hagan por ambos lados.
    Retiramos con cuidado el papel de horno de los filetes de pollo con bechamel. Primero los pasamos por harina, luego por el huevo batido y finalmente los recubrimos bien de pan rallado.
    Comprobamos que queda toda la superficie bien cubierta, para que resulte un rebozado completo y homogéneo.
    Freímos con el aceite bien caliente por ambos lados hasta que vemos que tienen un tono dorado y crujiente. En su interior la carne estará jugosa y la salsa bechamel se habrá vuelto cremosa.
    Retiramos y reservamos sobre un papel absorbente para que suelten el exceso de aceite.
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