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Cuando pensamos en Ulises, lo primero que se nos viene a la cabeza es el gran héroe de la mitología griega. Protagonista de la Ilíada y de la Odisea de Homero. Ulises era el rey de Ítaca que se pasó fuera de su tierra más de 20 años. Debido, por un lado, a la guerra y por otro por ciertas circunstancias que se le ponían enfrente y retrasaron tanto su regreso.

En cierta manera, esto tiene que ver con el llamado síndrome de Ulises. También se le conoce como el síndrome del emigrante, que presenta un estrés crónico y múltiple. Si has oído hablar de él pero todavía no tienes muy claro lo que viene a decir, aquí te lo explicaremos. ¡Descúbrelo!.

Aunque se puede decir que el síndrome de Ulises es un cuadro psicológico, no se puede relacionar con otros problemas como la depresión o ciertos desórdenes mentales, ni mucho menos. En este caso no se recurre a medicación, sino a ciertas terapias para que la persona pueda hacer frente a la situación.

El síndrome de Ulises afecta a muchos inmigrantes. Esto es porque tienen que separarse de sus personas queridas, de manera involuntaria pero necesaria en muchos casos. Tienen que hacer frente a una nueva vida lejos de todos ellos. Además, tendrán que comenzar a vivir y descubrir nuevas culturas, etc.

El síndrome de Ulises afecta a más de 50 millones de personas en todo el mundo. Tan solo en España se dice que hay alrededor de unos 800.000 casos. Se trata de un cuadro de estrés límite.

Son muchas las personas que tienen que comenzar de nuevo en un país totalmente diferente. Desde luego, por la cabeza se les pasa el no saber si podrán sobrevivir, si encontrarán un techo para poder vivir, es decir, la lucha por la supervivencia. Todo ello lleva a una situación de angustia y estrés.

Se junta el nervio con el miedo y la angustia dando lugar a lo que conocemos con el síndrome de Ulises. Así que, para tratarlo siempre es preferible ponerse en manos expertas. Los psicólogos te ayudarán a llevar mejor estas carencias, para poder mirar hacia delante y ver cómo las cosas pueden resolverse de manera más optimista. Del mismo modo son  muchas las terapias que ya se centran en este cuadro de estrés.