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"El Manuscrito de Zhendu"Cap.4 -Regreso a Chabarowsk- 1/1 (En tierra Sanabresa)

Iniciado por Serjey, Jul 18, 2015, 22:33:35

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niko

Amanecía un nuevo día y las dudas de Xio por más que meditaba, no le hacían tener claro cual era el camino que seguir, tomó la decición de sumergirse en aquellas aguas cristalinas del Lago de Sanabria, cuando de repente apareció Barcenote y sus sospechas se hicieron reales. Barcenote, sin mediar palabra, abrió un viejo pergamino en el cual apenas se distinguían las letras, ponía: "Aquél que descubra la paz espiritual vivirá para siempre, pero nunca podrá volver a casa, vagará errante toda la vida hasta perecer en el corazón de la estepa Sanabresa, tierra del general dayolok temible enemigo, que nadie quisiera tener como rival en ninguna parte, ingeniero de armas y proyectiles su mente perversa no paraba de pensar en devorar todo lo que surgía en su camino, se puso manos a la obra tenia que llegar hasta los confines de esas tierras y apoderarse de todo lo que se pusiera en su camino, para empezar a dominar a los que se opusieron a su reinado, cuando quiso empezar a cerrar la ofensiva se acordó de las palabras del viejo sabio, quien le enseñó a profundizar dentro de su mente y buscar la paz espiritual para sentir que aunque todo se vuelva gris y turbio siempre hay que levantarse y seguir luchando, la contienda continúa su marcha imparable hacia la libertad del ser humano en su constante camino, siempre sin mirar atras y lo aprendido del caminar tenia que ponerlo en practica. A lo lejos se veía el blasón con una parabólica apuntando hacia el más allá¿en que estaria pensando chachotek? Seguramente en un universo paralelo incitado por la gran cantidad de imagenes que venian a mostrarse en sus sueños y un ambiente de incertidumbre lo tenia siempre en un estado de inquietud, lo que provocaba delirios y dolores de cabeza,recordo en su infancia cuando aun jugaba con espadas de madera, que lo importante en la vida era ser fiel a los ideales y amigos.

Y así fueron pasando los días al mismo tiempo que Xío continuaba profundizando en sus recuerdos,imaginando que hubiera pasado si hubiera tomado otro camino distinto, si su destino no se encontrara en Sanabria, nunca podría encontrar el manuscrito ni tendría la posibilidad de descubrir quien sería el portador del Manuscrito. Sin embargo, su esperanza de encontrar el camino correcto le daba fuerzas para levantarse y seguir caminando en busca de aquello que tanto anhelaba y que le permitiría obtener lo que se había propuesto y que siempre había soñado.  Ahora, sólo le hacía falta encontrar lo que verdaderamente quería obtener. Pero para ello, necesitaba un conocedor de la zona, alguien que supiera por donde llegar, le habían hablado de un tal Sve que con Nikolovsky y Dayolisky estaban siempre liandola. Pero sabía que serían los mejores compañeros de viaje que podía tener, para obtener el tan ansiado manuscrito que tanto les iba a mejorar la vuelta en su lejano Chabarowsk. No había nada que los demás no supieran, sin embargo Poloñok no lo iba a desvelar, pero Chachotesky con su vehemencia se decidió a contar los deseos de Xio que eran desplazarse hasta Candanchú para reunirse con su mentor y ofrecerle su apoyo en aquellos momentos tan complicados. Era tarea difícil, encontrar a Dasilviska era imprescindible, solamente él conocía toda la encrucijada de pasadizos secretos para llegar a la caverna mediática cuyo nombre "Hostal San Francisco" se vislumbraba desde lo lejos.

Con todo, Xío emprendió viaje, un trozo pequeño de pan, un pellejo de vino tinto, y la compañia de los lobos hicieron que su andadura fuese un poco más llevadera, aun a pesar de todo, la muerte del perro Bayron le afectó profundamente. ¡Adelante!, gritó. Sus tres amigos la siguieron, sabía que podía contar con ellos para intentar conseguir lo que nadie antes había intentado,entrar en las grutas subterráneas ocultas en los aledaños de las montañas de Sanabria a través del río Tera, caminaban pensativos sin hablar entre ellos, el paisaje tenebroso y el Lago de Sanabria al fondo, con sus aguas de los montes Sinaí, Vulcano y Candanchú, presagiaban una agradable y plácida balada, pero de repente una tromba de agua los obligo a salir con lo puesto, que no era mucho, pero tenían el pellejo de vino y la hogaza de pan. Desgraciadamente, en el horizonte se divisaban negros nubarrones que anunciaban un apagón digital de terriblesí, todo era muy confuso y a pesar de ello, Xio tomó una decisión muy dura, seguiría sola de ahora en adelante, aunque ello le llevara a enfrentarse a sus temores y la necesidad de desenfundar su fría espada, con la convicción de proteger a sus mas fieles allegados y a todo aquel  que lo necesitara.

De pronto, entre la maleza apareció lo que estaba buscando, una piedra que tenía un poder que se sentía al arrojarla contra el suelo y emitía una energía modulada en ondas hercianas de baja frecuencia, al cogerla notó una energia como nunca había visto, era una sensación maravillosa, nunca sentida en ningún ser humano, sólo comparable a la experiencia vivida cuando siendo niña subio al lomo del caballo de Nikolovsky y sintió los roces de las espuelas sobre el costado, el control del equino en pleno galope la hizo sentir tan libre que nunca más volvería a recordar aquellos días. Su mirada se dirigió a la piedra, tenía un color azul celeste, que hacía recordar un atardecer de Chabarowsk, alzó su puño y dijo: "¡Volveré!". La noche los sorprendió cuando vieron al toro de fuego trotar por la colina como alma que lleva el diablo, pero todo era fruto de su imaginación, aquella maldita pócima, hacía que Xio no viera más allá de sus pensamientos, los recuerdos se le amontonaban, y no podía ver la realidad que sucumbía a su alrededor. De pronto un estruendo la arrancó de sus sueños, era un fuerte ruido infernal como si la montaña se hubiera manifestado exigiendo paz y obligando a Xio a tomar una drástica decisión sobre sus aliados.

Todo estaba claro, cuando estuviera preparada saldria a buscar el mapa con las coordenadas que el capitán Serjey le había enviado através del foro Zona Satelite, pero nunca esperaba que aquello surgiera efecto porque los entes malignos interferían la relación señal a ruido y era demasiado complejo descifrar aquello, no obstante estaba decidida a seguir adelante fuera como fuera, nada impediría que llegara a realizar la hazaña que tenía en mente ,entrar al monasterio y robar el caliz sagrado. Si, el Santo Grial que tanto sufrimiento le ha hecho pasar y por el que todos sus enemigos ansiaban lograr el poder del Manuscrito, pero precisamente esto es lo que tenia que evitar que cayera en manos de fantasmas blancos con arapos y telarañas, entonces cuanto todo parecía que se iba al garete escucho una voz amiga, que le indicaba el camino y el tempo correcto¿cuantos años llevaba sin verlo? Esto hizo que la desconfianza hacia los demas aflorara en un leve suspiro, quizás no debería mostrarse tan ingenua ante los demas y ser un poco más autoritaria. Asi, todos y cada uno de los consejos que había recibido en el pasado, le harían vencer sus temores a ser rechazada, ella se sentía como una extraña entre la gente que tenía alrededor, pero una vez que se integraba era una fiel amiga de sus amigos.Tenia que idear un plan para poder llevar a cabo su plan, el que iba a ascender desde los puestos de soldado hasta lugarteniente de el más grande ejército que jamás se hubiera podido imaginar. Para llegar al manuscrito tendria que ponerse en contacto con Chachotesky, primo-hermano de el más intrépido estratega en el campo de batalla y en otras lides secretas que no conocía nadie,era tan astuto como un águila y veloz como una libre tiroteada en pleno vuelo y reforzada por los avatares de la vieja guardia, comenzó a conseguir que la espada de Barcenote fuera blandida al viento de poniente, eso no presagiaba nada bueno, pero aún asi, comenzó blandiendo la espada y cortando cabezas.

La paz en oriente estaba llegando a su fin, todo empezaba a desmoronarse. Las leyes se volvían cada vez más estrictas y la población no podia pagar los elevados impuestos, pero como siempre, había una respuesta por parte de Xío, que siempre había luchado por la igualdad del ser humano empezó a mirar a su alrededor, y al fin se hizo con el poder de la ciudad Sanabresa, lo que hizo enfurecer a todos los que habiéndolo intentado no pudieron, la furia se hacía indescriptible, la ira flotaba en aire, iba a correr la sangre. La mañana siguiente la niebla dejaba entrever un espectáculo dantesco, la muerte y la desolación que tenía delante de si, nunca llego a comprender como se podía haber desatado aquella masacre, los hombres estaban vagando desorientados, yacían esparcidos por todas partes, ¡cuanta sangre!

Xío, decidió entonces, coger el camino hacia la montaña, necesitaba huir, dejar atrás aquel escenario dantesco, pero las hordas del maligno Jalasnok tenían controladas todas las rutas. De pronto, ante si se presentó el coronel de los ejércitos de la noche, quien sin mediar palabra, cogió la vara de mando y agitándola empezaron a salir zombies a diestro y siniestro, espeluznantes seres que le obligaban a disparar sin piedad a diestro y siniestro, tal como salían. Dubitativa pensó que lo mejor era cruzar por el lecho del río que tenía delante, bordearlo y alejarse de allí. Pero recordó su misión, "Defender el Manuscrito de Zendhu" así pues, sin mediar palabra, comenzó a organizar a sus seguidores de manera, que todos tuvieran claro lo que tenían que hacer, como si de un puzzle se tratara, fue organizando todo meticulosamente sin dejar nada al azar, cada cosa en su sitio, todo bien ajustado, hasta tal punto que se podía presagiar el desenlace final.

Sin embargo, todo cambió cuando una gran tromba de agua se acercaba a gran velocidad, era el tsunami producido por el malvado mago de oriente que bien-aventurado llegó del fondo del Lago Sanabrés, de donde salieron alimañas espeluznantes, aquello no podía ser real, tenía que ser un sueño, sin embargo, nada más lejos de la realidad, Xío disparó con la mente, porque los fusiles se habían mojado con la humedad que reinaba en el valle, un último cartucho tenía en sus manos para remediar lo peor que pudiera pasar, su vieja espada samurai la cual silbaba al aire, había sido empuñada y cortaba en dos todo aquello que se cruzaba en su camino, pero de repente apareció lo mas dantesco que vio nunca, un enigma convulsivo de silueta oscura y coraza roja escarlata, personaje siniestro donde los haya, quien se iba a convertir en su peor pesadilla, desearía no haberse topado con él aquella mañana, pero el destino juega con el futuro de la gente aunque no creamos que sea verdad, pero siempre hay que mantener la esperanza en un mañana sin guerras, pero con Nikolovsky y Sve todo sería más complicado, sus instintos de supervivencia podían enloquecerlos eran dos bombas de relojeria a punto de estallar, no había vuelta atrás, el conflicto estaba en su punto mas
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DAYOLI

Amanecía un nuevo día y las dudas de Xio por más que meditaba, no le hacían tener claro cual era el camino que seguir, tomó la decición de sumergirse en aquellas aguas cristalinas del Lago de Sanabria, cuando de repente apareció Barcenote y sus sospechas se hicieron reales. Barcenote, sin mediar palabra, abrió un viejo pergamino en el cual apenas se distinguían las letras, ponía: "Aquél que descubra la paz espiritual vivirá para siempre, pero nunca podrá volver a casa, vagará errante toda la vida hasta perecer en el corazón de la estepa Sanabresa, tierra del general dayolok temible enemigo, que nadie quisiera tener como rival en ninguna parte, ingeniero de armas y proyectiles su mente perversa no paraba de pensar en devorar todo lo que surgía en su camino, se puso manos a la obra tenia que llegar hasta los confines de esas tierras y apoderarse de todo lo que se pusiera en su camino, para empezar a dominar a los que se opusieron a su reinado, cuando quiso empezar a cerrar la ofensiva se acordó de las palabras del viejo sabio, quien le enseñó a profundizar dentro de su mente y buscar la paz espiritual para sentir que aunque todo se vuelva gris y turbio siempre hay que levantarse y seguir luchando, la contienda continúa su marcha imparable hacia la libertad del ser humano en su constante camino, siempre sin mirar atras y lo aprendido del caminar tenia que ponerlo en practica. A lo lejos se veía el blasón con una parabólica apuntando hacia el más allá¿en que estaria pensando chachotek? Seguramente en un universo paralelo incitado por la gran cantidad de imagenes que venian a mostrarse en sus sueños y un ambiente de incertidumbre lo tenia siempre en un estado de inquietud, lo que provocaba delirios y dolores de cabeza,recordo en su infancia cuando aun jugaba con espadas de madera, que lo importante en la vida era ser fiel a los ideales y amigos.

Y así fueron pasando los días al mismo tiempo que Xío continuaba profundizando en sus recuerdos,imaginando que hubiera pasado si hubiera tomado otro camino distinto, si su destino no se encontrara en Sanabria, nunca podría encontrar el manuscrito ni tendría la posibilidad de descubrir quien sería el portador del Manuscrito. Sin embargo, su esperanza de encontrar el camino correcto le daba fuerzas para levantarse y seguir caminando en busca de aquello que tanto anhelaba y que le permitiría obtener lo que se había propuesto y que siempre había soñado.  Ahora, sólo le hacía falta encontrar lo que verdaderamente quería obtener. Pero para ello, necesitaba un conocedor de la zona, alguien que supiera por donde llegar, le habían hablado de un tal Sve que con Nikolovsky y Dayolisky estaban siempre liandola. Pero sabía que serían los mejores compañeros de viaje que podía tener, para obtener el tan ansiado manuscrito que tanto les iba a mejorar la vuelta en su lejano Chabarowsk. No había nada que los demás no supieran, sin embargo Poloñok no lo iba a desvelar, pero Chachotesky con su vehemencia se decidió a contar los deseos de Xio que eran desplazarse hasta Candanchú para reunirse con su mentor y ofrecerle su apoyo en aquellos momentos tan complicados. Era tarea difícil, encontrar a Dasilviska era imprescindible, solamente él conocía toda la encrucijada de pasadizos secretos para llegar a la caverna mediática cuyo nombre "Hostal San Francisco" se vislumbraba desde lo lejos.

Con todo, Xío emprendió viaje, un trozo pequeño de pan, un pellejo de vino tinto, y la compañia de los lobos hicieron que su andadura fuese un poco más llevadera, aun a pesar de todo, la muerte del perro Bayron le afectó profundamente. ¡Adelante!, gritó. Sus tres amigos la siguieron, sabía que podía contar con ellos para intentar conseguir lo que nadie antes había intentado,entrar en las grutas subterráneas ocultas en los aledaños de las montañas de Sanabria a través del río Tera, caminaban pensativos sin hablar entre ellos, el paisaje tenebroso y el Lago de Sanabria al fondo, con sus aguas de los montes Sinaí, Vulcano y Candanchú, presagiaban una agradable y plácida balada, pero de repente una tromba de agua los obligo a salir con lo puesto, que no era mucho, pero tenían el pellejo de vino y la hogaza de pan. Desgraciadamente, en el horizonte se divisaban negros nubarrones que anunciaban un apagón digital de terriblesí, todo era muy confuso y a pesar de ello, Xio tomó una decisión muy dura, seguiría sola de ahora en adelante, aunque ello le llevara a enfrentarse a sus temores y la necesidad de desenfundar su fría espada, con la convicción de proteger a sus mas fieles allegados y a todo aquel  que lo necesitara.

De pronto, entre la maleza apareció lo que estaba buscando, una piedra que tenía un poder que se sentía al arrojarla contra el suelo y emitía una energía modulada en ondas hercianas de baja frecuencia, al cogerla notó una energia como nunca había visto, era una sensación maravillosa, nunca sentida en ningún ser humano, sólo comparable a la experiencia vivida cuando siendo niña subio al lomo del caballo de Nikolovsky y sintió los roces de las espuelas sobre el costado, el control del equino en pleno galope la hizo sentir tan libre que nunca más volvería a recordar aquellos días. Su mirada se dirigió a la piedra, tenía un color azul celeste, que hacía recordar un atardecer de Chabarowsk, alzó su puño y dijo: "¡Volveré!". La noche los sorprendió cuando vieron al toro de fuego trotar por la colina como alma que lleva el diablo, pero todo era fruto de su imaginación, aquella maldita pócima, hacía que Xio no viera más allá de sus pensamientos, los recuerdos se le amontonaban, y no podía ver la realidad que sucumbía a su alrededor. De pronto un estruendo la arrancó de sus sueños, era un fuerte ruido infernal como si la montaña se hubiera manifestado exigiendo paz y obligando a Xio a tomar una drástica decisión sobre sus aliados.

Todo estaba claro, cuando estuviera preparada saldria a buscar el mapa con las coordenadas que el capitán Serjey le había enviado através del foro Zona Satelite, pero nunca esperaba que aquello surgiera efecto porque los entes malignos interferían la relación señal a ruido y era demasiado complejo descifrar aquello, no obstante estaba decidida a seguir adelante fuera como fuera, nada impediría que llegara a realizar la hazaña que tenía en mente ,entrar al monasterio y robar el caliz sagrado. Si, el Santo Grial que tanto sufrimiento le ha hecho pasar y por el que todos sus enemigos ansiaban lograr el poder del Manuscrito, pero precisamente esto es lo que tenia que evitar que cayera en manos de fantasmas blancos con arapos y telarañas, entonces cuanto todo parecía que se iba al garete escucho una voz amiga, que le indicaba el camino y el tempo correcto¿cuantos años llevaba sin verlo? Esto hizo que la desconfianza hacia los demas aflorara en un leve suspiro, quizás no debería mostrarse tan ingenua ante los demas y ser un poco más autoritaria. Asi, todos y cada uno de los consejos que había recibido en el pasado, le harían vencer sus temores a ser rechazada, ella se sentía como una extraña entre la gente que tenía alrededor, pero una vez que se integraba era una fiel amiga de sus amigos.Tenia que idear un plan para poder llevar a cabo su plan, el que iba a ascender desde los puestos de soldado hasta lugarteniente de el más grande ejército que jamás se hubiera podido imaginar. Para llegar al manuscrito tendria que ponerse en contacto con Chachotesky, primo-hermano de el más intrépido estratega en el campo de batalla y en otras lides secretas que no conocía nadie,era tan astuto como un águila y veloz como una libre tiroteada en pleno vuelo y reforzada por los avatares de la vieja guardia, comenzó a conseguir que la espada de Barcenote fuera blandida al viento de poniente, eso no presagiaba nada bueno, pero aún asi, comenzó blandiendo la espada y cortando cabezas.

La paz en oriente estaba llegando a su fin, todo empezaba a desmoronarse. Las leyes se volvían cada vez más estrictas y la población no podia pagar los elevados impuestos, pero como siempre, había una respuesta por parte de Xío, que siempre había luchado por la igualdad del ser humano empezó a mirar a su alrededor, y al fin se hizo con el poder de la ciudad Sanabresa, lo que hizo enfurecer a todos los que habiéndolo intentado no pudieron, la furia se hacía indescriptible, la ira flotaba en aire, iba a correr la sangre. La mañana siguiente la niebla dejaba entrever un espectáculo dantesco, la muerte y la desolación que tenía delante de si, nunca llego a comprender como se podía haber desatado aquella masacre, los hombres estaban vagando desorientados, yacían esparcidos por todas partes, ¡cuanta sangre!

Xío, decidió entonces, coger el camino hacia la montaña, necesitaba huir, dejar atrás aquel escenario dantesco, pero las hordas del maligno Jalasnok tenían controladas todas las rutas. De pronto, ante si se presentó el coronel de los ejércitos de la noche, quien sin mediar palabra, cogió la vara de mando y agitándola empezaron a salir zombies a diestro y siniestro, espeluznantes seres que le obligaban a disparar sin piedad a diestro y siniestro, tal como salían. Dubitativa pensó que lo mejor era cruzar por el lecho del río que tenía delante, bordearlo y alejarse de allí. Pero recordó su misión, "Defender el Manuscrito de Zendhu" así pues, sin mediar palabra, comenzó a organizar a sus seguidores de manera, que todos tuvieran claro lo que tenían que hacer, como si de un puzzle se tratara, fue organizando todo meticulosamente sin dejar nada al azar, cada cosa en su sitio, todo bien ajustado, hasta tal punto que se podía presagiar el desenlace final.

Sin embargo, todo cambió cuando una gran tromba de agua se acercaba a gran velocidad, era el tsunami producido por el malvado mago de oriente que bien-aventurado llegó del fondo del Lago Sanabrés, de donde salieron alimañas espeluznantes, aquello no podía ser real, tenía que ser un sueño, sin embargo, nada más lejos de la realidad, Xío disparó con la mente, porque los fusiles se habían mojado con la humedad que reinaba en el valle, un último cartucho tenía en sus manos para remediar lo peor que pudiera pasar, su vieja espada samurai la cual silbaba al aire, había sido empuñada y cortaba en dos todo aquello que se cruzaba en su camino, pero de repente apareció lo mas dantesco que vio nunca, un enigma convulsivo de silueta oscura y coraza roja escarlata, personaje siniestro donde los haya, quien se iba a convertir en su peor pesadilla, desearía no haberse topado con él aquella mañana, pero el destino juega con el futuro de la gente aunque no creamos que sea verdad, pero siempre hay que mantener la esperanza en un mañana sin guerras, pero con Nikolovsky y Sve todo sería más complicado, sus instintos de supervivencia podían enloquecerlos eran dos bombas de relojeria a punto de estallar, no había vuelta atrás, el conflicto estaba en su punto mas álgido, sin embargo, todo podría
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Serjey

Amanecía un nuevo día y las dudas de Xio por más que meditaba, no le hacían tener claro cual era el camino que seguir, tomó la decición de sumergirse en aquellas aguas cristalinas del Lago de Sanabria, cuando de repente apareció Barcenote y sus sospechas se hicieron reales. Barcenote, sin mediar palabra, abrió un viejo pergamino en el cual apenas se distinguían las letras, ponía: "Aquél que descubra la paz espiritual vivirá para siempre, pero nunca podrá volver a casa, vagará errante toda la vida hasta perecer en el corazón de la estepa Sanabresa, tierra del general dayolok temible enemigo, que nadie quisiera tener como rival en ninguna parte, ingeniero de armas y proyectiles su mente perversa no paraba de pensar en devorar todo lo que surgía en su camino, se puso manos a la obra tenia que llegar hasta los confines de esas tierras y apoderarse de todo lo que se pusiera en su camino, para empezar a dominar a los que se opusieron a su reinado, cuando quiso empezar a cerrar la ofensiva se acordó de las palabras del viejo sabio, quien le enseñó a profundizar dentro de su mente y buscar la paz espiritual para sentir que aunque todo se vuelva gris y turbio siempre hay que levantarse y seguir luchando, la contienda continúa su marcha imparable hacia la libertad del ser humano en su constante camino, siempre sin mirar atras y lo aprendido del caminar tenia que ponerlo en practica. A lo lejos se veía el blasón con una parabólica apuntando hacia el más allá¿en que estaria pensando chachotek? Seguramente en un universo paralelo incitado por la gran cantidad de imagenes que venian a mostrarse en sus sueños y un ambiente de incertidumbre lo tenia siempre en un estado de inquietud, lo que provocaba delirios y dolores de cabeza,recordo en su infancia cuando aun jugaba con espadas de madera, que lo importante en la vida era ser fiel a los ideales y amigos.

Y así fueron pasando los días al mismo tiempo que Xío continuaba profundizando en sus recuerdos,imaginando que hubiera pasado si hubiera tomado otro camino distinto, si su destino no se encontrara en Sanabria, nunca podría encontrar el manuscrito ni tendría la posibilidad de descubrir quien sería el portador del Manuscrito. Sin embargo, su esperanza de encontrar el camino correcto le daba fuerzas para levantarse y seguir caminando en busca de aquello que tanto anhelaba y que le permitiría obtener lo que se había propuesto y que siempre había soñado.  Ahora, sólo le hacía falta encontrar lo que verdaderamente quería obtener. Pero para ello, necesitaba un conocedor de la zona, alguien que supiera por donde llegar, le habían hablado de un tal Sve que con Nikolovsky y Dayolisky estaban siempre liandola. Pero sabía que serían los mejores compañeros de viaje que podía tener, para obtener el tan ansiado manuscrito que tanto les iba a mejorar la vuelta en su lejano Chabarowsk. No había nada que los demás no supieran, sin embargo Poloñok no lo iba a desvelar, pero Chachotesky con su vehemencia se decidió a contar los deseos de Xio que eran desplazarse hasta Candanchú para reunirse con su mentor y ofrecerle su apoyo en aquellos momentos tan complicados. Era tarea difícil, encontrar a Dasilviska era imprescindible, solamente él conocía toda la encrucijada de pasadizos secretos para llegar a la caverna mediática cuyo nombre "Hostal San Francisco" se vislumbraba desde lo lejos.

Con todo, Xío emprendió viaje, un trozo pequeño de pan, un pellejo de vino tinto, y la compañia de los lobos hicieron que su andadura fuese un poco más llevadera, aun a pesar de todo, la muerte del perro Bayron le afectó profundamente. ¡Adelante!, gritó. Sus tres amigos la siguieron, sabía que podía contar con ellos para intentar conseguir lo que nadie antes había intentado,entrar en las grutas subterráneas ocultas en los aledaños de las montañas de Sanabria a través del río Tera, caminaban pensativos sin hablar entre ellos, el paisaje tenebroso y el Lago de Sanabria al fondo, con sus aguas de los montes Sinaí, Vulcano y Candanchú, presagiaban una agradable y plácida balada, pero de repente una tromba de agua los obligo a salir con lo puesto, que no era mucho, pero tenían el pellejo de vino y la hogaza de pan. Desgraciadamente, en el horizonte se divisaban negros nubarrones que anunciaban un apagón digital de terriblesí, todo era muy confuso y a pesar de ello, Xio tomó una decisión muy dura, seguiría sola de ahora en adelante, aunque ello le llevara a enfrentarse a sus temores y la necesidad de desenfundar su fría espada, con la convicción de proteger a sus mas fieles allegados y a todo aquel  que lo necesitara.

De pronto, entre la maleza apareció lo que estaba buscando, una piedra que tenía un poder que se sentía al arrojarla contra el suelo y emitía una energía modulada en ondas hercianas de baja frecuencia, al cogerla notó una energia como nunca había visto, era una sensación maravillosa, nunca sentida en ningún ser humano, sólo comparable a la experiencia vivida cuando siendo niña subio al lomo del caballo de Nikolovsky y sintió los roces de las espuelas sobre el costado, el control del equino en pleno galope la hizo sentir tan libre que nunca más volvería a recordar aquellos días. Su mirada se dirigió a la piedra, tenía un color azul celeste, que hacía recordar un atardecer de Chabarowsk, alzó su puño y dijo: "¡Volveré!". La noche los sorprendió cuando vieron al toro de fuego trotar por la colina como alma que lleva el diablo, pero todo era fruto de su imaginación, aquella maldita pócima, hacía que Xio no viera más allá de sus pensamientos, los recuerdos se le amontonaban, y no podía ver la realidad que sucumbía a su alrededor. De pronto un estruendo la arrancó de sus sueños, era un fuerte ruido infernal como si la montaña se hubiera manifestado exigiendo paz y obligando a Xio a tomar una drástica decisión sobre sus aliados.

Todo estaba claro, cuando estuviera preparada saldria a buscar el mapa con las coordenadas que el capitán Serjey le había enviado através del foro Zona Satelite, pero nunca esperaba que aquello surgiera efecto porque los entes malignos interferían la relación señal a ruido y era demasiado complejo descifrar aquello, no obstante estaba decidida a seguir adelante fuera como fuera, nada impediría que llegara a realizar la hazaña que tenía en mente ,entrar al monasterio y robar el caliz sagrado. Si, el Santo Grial que tanto sufrimiento le ha hecho pasar y por el que todos sus enemigos ansiaban lograr el poder del Manuscrito, pero precisamente esto es lo que tenia que evitar que cayera en manos de fantasmas blancos con arapos y telarañas, entonces cuanto todo parecía que se iba al garete escucho una voz amiga, que le indicaba el camino y el tempo correcto¿cuantos años llevaba sin verlo? Esto hizo que la desconfianza hacia los demas aflorara en un leve suspiro, quizás no debería mostrarse tan ingenua ante los demas y ser un poco más autoritaria. Asi, todos y cada uno de los consejos que había recibido en el pasado, le harían vencer sus temores a ser rechazada, ella se sentía como una extraña entre la gente que tenía alrededor, pero una vez que se integraba era una fiel amiga de sus amigos.Tenia que idear un plan para poder llevar a cabo su plan, el que iba a ascender desde los puestos de soldado hasta lugarteniente de el más grande ejército que jamás se hubiera podido imaginar. Para llegar al manuscrito tendria que ponerse en contacto con Chachotesky, primo-hermano de el más intrépido estratega en el campo de batalla y en otras lides secretas que no conocía nadie,era tan astuto como un águila y veloz como una libre tiroteada en pleno vuelo y reforzada por los avatares de la vieja guardia, comenzó a conseguir que la espada de Barcenote fuera blandida al viento de poniente, eso no presagiaba nada bueno, pero aún asi, comenzó blandiendo la espada y cortando cabezas.

La paz en oriente estaba llegando a su fin, todo empezaba a desmoronarse. Las leyes se volvían cada vez más estrictas y la población no podia pagar los elevados impuestos, pero como siempre, había una respuesta por parte de Xío, que siempre había luchado por la igualdad del ser humano empezó a mirar a su alrededor, y al fin se hizo con el poder de la ciudad Sanabresa, lo que hizo enfurecer a todos los que habiéndolo intentado no pudieron, la furia se hacía indescriptible, la ira flotaba en aire, iba a correr la sangre. La mañana siguiente la niebla dejaba entrever un espectáculo dantesco, la muerte y la desolación que tenía delante de si, nunca llego a comprender como se podía haber desatado aquella masacre, los hombres estaban vagando desorientados, yacían esparcidos por todas partes, ¡cuanta sangre!

Xío, decidió entonces, coger el camino hacia la montaña, necesitaba huir, dejar atrás aquel escenario dantesco, pero las hordas del maligno Jalasnok tenían controladas todas las rutas. De pronto, ante si se presentó el coronel de los ejércitos de la noche, quien sin mediar palabra, cogió la vara de mando y agitándola empezaron a salir zombies a diestro y siniestro, espeluznantes seres que le obligaban a disparar sin piedad a diestro y siniestro, tal como salían. Dubitativa pensó que lo mejor era cruzar por el lecho del río que tenía delante, bordearlo y alejarse de allí. Pero recordó su misión, "Defender el Manuscrito de Zendhu" así pues, sin mediar palabra, comenzó a organizar a sus seguidores de manera, que todos tuvieran claro lo que tenían que hacer, como si de un puzzle se tratara, fue organizando todo meticulosamente sin dejar nada al azar, cada cosa en su sitio, todo bien ajustado, hasta tal punto que se podía presagiar el desenlace final.

Sin embargo, todo cambió cuando una gran tromba de agua se acercaba a gran velocidad, era el tsunami producido por el malvado mago de oriente que bien-aventurado llegó del fondo del Lago Sanabrés, de donde salieron alimañas espeluznantes, aquello no podía ser real, tenía que ser un sueño, sin embargo, nada más lejos de la realidad, Xío disparó con la mente, porque los fusiles se habían mojado con la humedad que reinaba en el valle, un último cartucho tenía en sus manos para remediar lo peor que pudiera pasar, su vieja espada samurai la cual silbaba al aire, había sido empuñada y cortaba en dos todo aquello que se cruzaba en su camino, pero de repente apareció lo mas dantesco que vio nunca, un enigma convulsivo de silueta oscura y coraza roja escarlata, personaje siniestro donde los haya, quien se iba a convertir en su peor pesadilla, desearía no haberse topado con él aquella mañana, pero el destino juega con el futuro de la gente aunque no creamos que sea verdad, pero siempre hay que mantener la esperanza en un mañana sin guerras, pero con Nikolovsky y Sve todo sería más complicado, sus instintos de supervivencia podían enloquecerlos eran dos bombas de relojeria a punto de estallar, no había vuelta atrás, el conflicto estaba en su punto mas álgido, sin embargo, todo podría solucionarse pero una bala perdida

Y así fueron pasando los días al mismo tiempo que Xío continuaba profundizando en sus recuerdos,imaginando que hubiera pasado si hubiera tomado otro camino distinto, si su destino no se encontrara en Sanabria, nunca podría encontrar el manuscrito ni tendría la posibilidad de descubrir quien sería el portador del Manuscrito. Sin embargo, su esperanza de encontrar el camino correcto le daba fuerzas para levantarse y seguir caminando en busca de aquello que tanto anhelaba y que le permitiría obtener lo que se había propuesto y que siempre había soñado.  Ahora, sólo le hacía falta encontrar lo que verdaderamente quería obtener. Pero para ello, necesitaba un conocedor de la zona, alguien que supiera por donde llegar, le habían hablado de un tal Sve que con Nikolovsky y Dayolisky estaban siempre liandola. Pero sabía que serían los mejores compañeros de viaje que podía tener, para obtener el tan ansiado manuscrito que tanto les iba a mejorar la vuelta en su lejano Chabarowsk. No había nada que los demás no supieran, sin embargo Poloñok no lo iba a desvelar, pero Chachotesky con su vehemencia se decidió a contar los deseos de Xio que eran desplazarse hasta Candanchú para reunirse con su mentor y ofrecerle su apoyo en aquellos momentos tan complicados. Era tarea difícil, encontrar a Dasilviska era imprescindible, solamente él conocía toda la encrucijada de pasadizos secretos para llegar a la caverna mediática cuyo nombre "Hostal San Francisco" se vislumbraba desde lo lejos.

Con todo, Xío emprendió viaje, un trozo pequeño de pan, un pellejo de vino tinto, y la compañia de los lobos hicieron que su andadura fuese un poco más llevadera, aun a pesar de todo, la muerte del perro Bayron le afectó profundamente. ¡Adelante!, gritó. Sus tres amigos la siguieron, sabía que podía contar con ellos para intentar conseguir lo que nadie antes había intentado,entrar en las grutas subterráneas ocultas en los aledaños de las montañas de Sanabria a través del río Tera, caminaban pensativos sin hablar entre ellos, el paisaje tenebroso y el Lago de Sanabria al fondo, con sus aguas de los montes Sinaí, Vulcano y Candanchú, presagiaban una agradable y plácida balada, pero de repente una tromba de agua los obligo a salir con lo puesto, que no era mucho, pero tenían el pellejo de vino y la hogaza de pan. Desgraciadamente, en el horizonte se divisaban negros nubarrones que anunciaban un apagón digital de terriblesí, todo era muy confuso y a pesar de ello, Xio tomó una decisión muy dura, seguiría sola de ahora en adelante, aunque ello le llevara a enfrentarse a sus temores y la necesidad de desenfundar su fría espada, con la convicción de proteger a sus mas fieles allegados y a todo aquel  que lo necesitara.

De pronto, entre la maleza apareció lo que estaba buscando, una piedra que tenía un poder que se sentía al arrojarla contra el suelo y emitía una energía modulada en ondas hercianas de baja frecuencia, al cogerla notó una energia como nunca había visto, era una sensación maravillosa, nunca sentida en ningún ser humano, sólo comparable a la experiencia vivida cuando siendo niña subio al lomo del caballo de Nikolovsky y sintió los roces de las espuelas sobre el costado, el control del equino en pleno galope la hizo sentir tan libre que nunca más volvería a recordar aquellos días. Su mirada se dirigió a la piedra, tenía un color azul celeste, que hacía recordar un atardecer de Chabarowsk, alzó su puño y dijo: "¡Volveré!". La noche los sorprendió cuando vieron al toro de fuego trotar por la colina como alma que lleva el diablo, pero todo era fruto de su imaginación, aquella maldita pócima, hacía que Xio no viera más allá de sus pensamientos, los recuerdos se le amontonaban, y no podía ver la realidad que sucumbía a su alrededor. De pronto un estruendo la arrancó de sus sueños, era un fuerte ruido infernal como si la montaña se hubiera manifestado exigiendo paz y obligando a Xio a tomar una drástica decisión sobre sus aliados.

Todo estaba claro, cuando estuviera preparada saldria a buscar el mapa con las coordenadas que el capitán Serjey le había enviado através del foro Zona Satelite, pero nunca esperaba que aquello surgiera efecto porque los entes malignos interferían la relación señal a ruido y era demasiado complejo descifrar aquello, no obstante estaba decidida a seguir adelante fuera como fuera, nada impediría que llegara a realizar la hazaña que tenía en mente ,entrar al monasterio y robar el caliz sagrado. Si, el Santo Grial que tanto sufrimiento le ha hecho pasar y por el que todos sus enemigos ansiaban lograr el poder del Manuscrito, pero precisamente esto es lo que tenia que evitar que cayera en manos de fantasmas blancos con arapos y telarañas, entonces cuanto todo parecía que se iba al garete escucho una voz amiga, que le indicaba el camino y el tempo correcto¿cuantos años llevaba sin verlo? Esto hizo que la desconfianza hacia los demas aflorara en un leve suspiro, quizás no debería mostrarse tan ingenua ante los demas y ser un poco más autoritaria. Asi, todos y cada uno de los consejos que había recibido en el pasado, le harían vencer sus temores a ser rechazada, ella se sentía como una extraña entre la gente que tenía alrededor, pero una vez que se integraba era una fiel amiga de sus amigos.Tenia que idear un plan para poder llevar a cabo su plan, el que iba a ascender desde los puestos de soldado hasta lugarteniente de el más grande ejército que jamás se hubiera podido imaginar. Para llegar al manuscrito tendria que ponerse en contacto con Chachotesky, primo-hermano de el más intrépido estratega en el campo de batalla y en otras lides secretas que no conocía nadie,era tan astuto como un águila y veloz como una libre tiroteada en pleno vuelo y reforzada por los avatares de la vieja guardia, comenzó a conseguir que la espada de Barcenote fuera blandida al viento de poniente, eso no presagiaba nada bueno, pero aún asi, comenzó blandiendo la espada y cortando cabezas.

La paz en oriente estaba llegando a su fin, todo empezaba a desmoronarse. Las leyes se volvían cada vez más estrictas y la población no podia pagar los elevados impuestos, pero como siempre, había una respuesta por parte de Xío, que siempre había luchado por la igualdad del ser humano empezó a mirar a su alrededor, y al fin se hizo con el poder de la ciudad Sanabresa, lo que hizo enfurecer a todos los que habiéndolo intentado no pudieron, la furia se hacía indescriptible, la ira flotaba en aire, iba a correr la sangre. La mañana siguiente la niebla dejaba entrever un espectáculo dantesco, la muerte y la desolación que tenía delante de si, nunca llego a comprender como se podía haber desatado aquella masacre, los hombres estaban vagando desorientados, yacían esparcidos por todas partes, ¡cuanta sangre!

Xío, decidió entonces, coger el camino hacia la montaña, necesitaba huir, dejar atrás aquel escenario dantesco, pero las hordas del maligno Jalasnok tenían controladas todas las rutas. De pronto, ante si se presentó el coronel de los ejércitos de la noche, quien sin mediar palabra, cogió la vara de mando y agitándola empezaron a salir zombies a diestro y siniestro, espeluznantes seres que le obligaban a disparar sin piedad a diestro y siniestro, tal como salían. Dubitativa pensó que lo mejor era cruzar por el lecho del río que tenía delante, bordearlo y alejarse de allí. Pero recordó su misión, "Defender el Manuscrito de Zendhu" así pues, sin mediar palabra, comenzó a organizar a sus seguidores de manera, que todos tuvieran claro lo que tenían que hacer, como si de un puzzle se tratara, fue organizando todo meticulosamente sin dejar nada al azar, cada cosa en su sitio, todo bien ajustado, hasta tal punto que se podía presagiar el desenlace final.

Sin embargo, todo cambió cuando una gran tromba de agua se acercaba a gran velocidad, era el tsunami producido por el malvado mago de oriente que bien-aventurado llegó del fondo del Lago Sanabrés, de donde salieron alimañas espeluznantes, aquello no podía ser real, tenía que ser un sueño, sin embargo, nada más lejos de la realidad, Xío disparó con la mente, porque los fusiles se habían mojado con la humedad que reinaba en el valle, un último cartucho tenía en sus manos para remediar lo peor que pudiera pasar, su vieja espada samurai la cual silbaba al aire, había sido empuñada y cortaba en dos todo aquello que se cruzaba en su camino, pero de repente apareció lo mas dantesco que vio nunca, un enigma convulsivo de silueta oscura y coraza roja escarlata, personaje siniestro donde los haya, quien se iba a convertir en su peor pesadilla, desearía no haberse topado con él aquella mañana, pero el destino juega con el futuro de la gente aunque no creamos que sea verdad, pero siempre hay que mantener la esperanza en un mañana sin guerras, pero con Nikolovsky y Sve todo sería más complicado, sus instintos de supervivencia podían enloquecerlos eran dos bombas de relojeria a punto de estallar, no había vuelta atrás, el conflicto estaba en su punto mas caliente. Una bala perdida fué
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